El tiempo no puede ser retornado, sin embargo sufre un constante cambio debido a nuestras acciones, y este resultado solo puede ser arreglado en el futuro, osea en nuestro presente. Solo tenemos que hablar, la decisión es nuestra o la tomamos o la dejamos y la pregunta es ¿Cuanto tiempo tenemos? ¿Habrá un limite de tiempo?. Las oportunidades que se presentan deben ser tomadas con valentía, sin rodeos. El problema que sea tendrá que ser arreglado lo más rápido posible.
El tiempo no siempre es una ventaja o una arma, muchas veces es una desventaja.
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