El enamoramiento es como una maldición, no te deja fluir, ser libre, te esclaviza haciéndote parte de una cadena amorosa. Te tiene preso a aquella persona que tanto admiras, que observas detalladamente desde el primer instante en que la viste. Aunque es un sentimiento maravilloso, no siempre se tiene lo que se espera. Es como una maldición simplemente porque no deja que pienses en otra cosa mas que en ella, no deja que quieras algo pues quieres estar con ella, tus sueños le pertenecen, tu corazón todo tu cuerpo desea estar junto al de ella es una entrega total de amor puro, tus sentidos gritando su nombre, desde el tacto hasta los ojos, pasando por los oídos, la boca, la lengua, la nariz todo hasta penetrar en la mente encerrando al corazón dentro de una burbuja donde solo esta su imagen. Todo esto ocurre cuando la miras, cuando dejas de estar con ella y vuelves a tu zona de confort sintiendo que necesitas algo, que te falta algo y no es cierto... porque te gusta estar con ella pero te falta algo.
Pero esta esclavitud puede llegar a su fin... se puede conseguir la libertad
No hay comentarios.:
Publicar un comentario